SEVILLA / Amandine Beyer-Compañía Rosas: bailar a Biber, celebrar la vida y sus misterios

Sevilla. Teatro Central. 19-III-2022. Sonatas de los misterios. Amandine Beyer, violín. Gli Incogniti. Compañía Rosas. Anne Teresa de Keersmaeker, coreografía. Intérpretes: Cintia Sebók, Laura Maria Poletti, Mariana Miranda, Sophia Dinkel, Frank Gizycki, Jacob Storer, José Paulo dos Santos, Lav Crncevic, Mamadou Wagué, Rafa Galdino. Obras de Biber.
Coincidieron en Sevilla, durante la noche del pasado sábado, dos de las más grandes violinistas del repertorio histórico: Lina Tur Bonet, en el Espacio Turina como concertino de la Orquesta Barroca de Sevilla con las Suites de Bach y Amandine Beyer, en el Teatro Central, con las Sonatas del Rosario o de los Misterios (con todas) de Biber. Faltaría una tercera gran dama en este repertorio, consagrada así por su revolucionario Vivaldi: Patricia Kopatchinskaja.
Quedémonos con Beyer. Apenas ha grabado a Biber, quizás porque en esta colección de obras la cantidad de versiones es tan amplia que se podía pensar que era suficiente. Después de oírla sí que precisamos fijar en disco (en la memoria ya lo está) su interpretación de la misma. Acompañada del jugoso y sereno continuo de su grupo, Gli Incogniti, la violinista francesa desplegó durante más de dos horas una lectura que fue un dechado de mesura y de constantes metamorfosis, esquivando la atonía y sorprendiendo en cada nuevo episodio de esta partitura profundamente meditativa en la que la ornamentación, la fantasía, lo es todo. O lo es mucho.
El violín de Beyer tiene un sonido suntuoso a la vez que terrenal, no esquiva su humanidad, pero es capaz de conmovernos hasta la lágrima como lo hizo en la Passacaglia final, con cada nota paladeada, morosa, como si después de más de dos horas de música aún no quisiera despedirse. Su sonar con el escenario del Central completamente vacío y en penumbra supuso (¡qué paradoja!) un instante de inmensa teatralidad. El punto más alto en conjunción con la coreografía desplegada por Rosas se haría esperar hasta la chacona de la Sonata 14 La Asunción de la Virgen, resuelta con una danza de exultante vitalidad, belleza (espiritual, también física) y comunión por parte de los bailarines; toda una celebración de la vida.
Probablemente sea Anne Teresa de Keersmaeker la coreógrafa más atenta a la música de la segunda mitad del siglo XX. Ha danzado ella y los suyos profusamente a Steve Reich, Arnold Schönberg y Gerard Grisey; también a Bach; cuyas recientes Variaciones Goldberg comentamos aquí, una experiencia que todavía recordamos cuando volvemos a encontrarnos con una creación (reivindicando ahora nada menos que a Biber) que demuestra su inquebrantable fe en el lenguaje que ella misma ha desarrollado y depurado hasta constituir un santo y seña de la danza contemporánea.
En estas Sonatas del Misterio los bailarines, ya en cinco dolorosos solos, ya en compañía, desplegaron la abstracta y precisa danza de la artista belga, fiel a la circularidad y a la verticalidad de los saltos, también magnética en el simple deambular por el escenario o en el trazado de frías líneas con los brazos y el cuerpo. Reiterados relámpagos estroboscópicos enunciaban cada nuevo misterio; y allí en un lateral Beyer y los suyos reconvertían la danza en liturgia; quebrada repentinamente por la gozosa voz country de Lynn Anderson y su Rose garden mientras que el escenario del Central se derramaba en rosa. Larga vida a Rosas.
Ismael G. Cabral
(Foto: Anne Van Aerschot)
2 comentarios para “SEVILLA / Amandine Beyer-Compañía Rosas: bailar a Biber, celebrar la vida y sus misterios”
[…] danzada de las Sonatas del Rosario de Biber, al alimón con Gli Incogniti (cuya reseña pueden leer aquí). En esta ocasión el coreógrafo François Chaignaud unía su imaginación con el director de Les […]
<strong>… [Trackback]</strong>
[…] Find More here to that Topic: scherzo.es/sevilla-amandine-beyer-compania-rosas-bailar-a-biber-celebrar-la-vida-y-sus-misterios/ […]
Los comentarios están cerrados.