‘Wozzeck’ de Berg llega al Liceu de Barcelona con Matthias Goerne como protagonista
El próximo 22 de mayo, regresa dieciséis años después al escenario del Gran Teatre del Liceu uno de los hitos operísticos del siglo XX: Wozzeck, de Alban Berg. Con esta ópera, estrenada en 1925, Wozzeck mostró hasta qué punto el género lírico podía adaptarse a la sensibilidad de los tiempos modernos sin traicionar su esencia. Berg sabe moverse en los recovecos de la tonalidad y del atonalismo, entre formas tradicionales y novedosas, consiguiendo una obra de impresionante impacto dramático y ofreciendo al público un retrato desgarrador y trágico de la condición humana.
Las seis funciones liceístas (del 22 de mayo al 2 de junio) casi coinciden en el tiempo con las representaciones que de este mismo título ofrece el Palau de Les Arts de Valencia. El montaje del coliseo barcelonés cuenta con la original propuesta escénica del artista plástico William Kentridge, procedente del Festival de Salzburgo, donde cosechó excelentes críticas [arriba, una escena]. Con la ayuda de proyecciones, dibujos, máscaras antigás y otros recursos, Kentridge retrata los horrores de la sociedad moderna y realza la deshumanización a la que está sometido el protagonista. La dirección musical del espectáculo correrá a cargo de Josep Pons.
El reparto vocal estará encabezado por uno de los grandes especialistas en este rol, el barítono Matthias Goerne. Le acompañarán sobre el escenario Annemarie Kremer (Marie) en sustitución de la inicialmente prevista Elena Zhidkova, Torsten Kerl (Tambor Mayor), Peter Tantsits (Andres), Mikeldi Atxalndabaso (Capitán) y Peter Rose (Doctor), entre otros.
(foto: Salzburger Festspiele/Ruth Walz)