VITERBO / ‘S. Giovanni Battista’ de Stradella: pirotecnia de colores
Viterbo. Iglesia de Santa Maria Nova. 31-VIII-2024. Silvia Frigato, Dorota Szczepańska, Danilo Pastore, Roberto Manuel Zangari, Masashi Tomosugi Director: Andrea De Carlo. Ensemble Mare Nostrum. Alessandro Stradella: S. Giovanni Battista.
El Festival Barroco Alessandro Stradella inauguraba su edición de 2024 en la Iglesia de Santa Maria Nuova de Viterbo (la pureza de su estilo románico estuvo sugestivamente iluminada) con la interpretación del oratorio para 5 voces, concertino y concerto grosso San Giovanni Battista, de Alessandro Stradella, compuesto en 1675. Una etapa más y final de la iniciativa The Stradella Project, que comenzó en 2013 con el ambicioso proyecto de grabar las composiciones completas del músico. Ya se ha cubierto mucho terreno, salpicado de innumerables premios internacionales. El proyecto no está completo.
Andrea De Carlo ya propuso este oratorio en el Teatro Carlo Felice de Génova en 2021. Alessandro Stradella era un compositor poco conocido antes de que De Carlo, husmeando en su repertorio olvidado y a menudo desconocido, lo devolviera a un primer plano. Un compositor que se adelantó a su tiempo. El oratorio S. Giovanni Battista es una composición importante. Sin duda, la más conocida del autor, probablemente la mejor de Stradella. De hecho, fue uno de los 14 oratorios encargados por la Venerable Compañía de la Piedad de la Nación Florentina (y el único de ellos que ha llegado hasta nosotros) para las celebraciones del Año Santo de 1675, durante el cual los teatros y los entretenimientos mundanos fueron prohibidos por el Papa Clemente X en Roma. A las mujeres, en particular, se les prohibió cualquier espectáculo público. El… hambre de música en Roma fue aplacada con música sacra.
Así que se trató de un encargo importante. S. Giovanni Battista es una obra refinada que cuenta con arias de intenso dramatismo. Además, el diálogo del concertino con el concerto grosso subraya su expresividad. Esta última plantilla se adelanta a su tiempo, pues este tipo de instrumentación está indisolublemente ligado a Corelli, pero más tarde.
Andrea De Carlo, al frente de “su” Ensemble Mare Nostrum, es un pintor que, con el gesto, esboza las melodías de gran dramatismo de la composición utilizando una rica paleta de matices. Es una verdadera pirotecnia de colores. Hay un entendimiento simbiótico y una complicidad entre orquesta y director: los músicos que la componen casi anticipan su gesto.
El reparto estuvo bien. Por supuesto, los tres papeles femeninos ya no son interpretados por castrati: Herodías madre y Herodías hija (no Salomé), estuvieron a cargo de Dorota Szczepańska y Silvia Frigato respectivamente. Hermoso el timbre de la primera e intenso el de la segunda. Masashi Tomosugi fue un Herodes vibrante. Menos convincente resultó el contratenor Danilo Pastore (San Juan Bautista), que no abrazó la imaginería de las voces de castrati, como es habitual hoy en día. Roberto Manuel Zangari (Consejero), con sus numerosos recitativos, fue el tejido conectivo de la historia, y lo interpretó bien.
Para el año próximo está previsto el lanzamiento del CD en el sello Arcana/Outhere.
Franco Soda