Talivaldis Kenins: una experiencia reveladora y gratificante

KENINS:
Sinfonías nº 4, 5, 6 y 8. Canzona Sonata. Aria per corde. Santa Vizine, viola. Iveta Apkalna, órgano. Orquesta Sinfinfónica Nacional Letona. Directores: Guntis Kuzma y Andris Poga. ONDINE 1354-2/1388-2 (2 CD)
Talivaldis Kenins protagonizaba hace año y medio un capítulo de Músicas sumergidas (Scherzo nº 370) al que —para no repetir lo dicho entonces— remitimos al lector interesado por descubrir un legado, a todas luces extraordinario, de circulación habitual en su Canadá adoptivo pero ignorado a este lado del Atlántico y particularmente en Letonia, su tierra natal.
Tras la grata sorpresa del volumen inicial (que reunía la Sinfonía nº 1, el Concerto di Camera nº 1 y el Concierto para piano, cuerdas y percusión) Ondine edita —en condiciones difícilmente mejorables— dos nuevas entregas de lo que ya podemos considerar como uno de los mayores acontecimientos discográficos de los últimos años, en lo que a materia sinfónica se refiere, pues pocas son las ocasiones en que el melómano curioso puede explorar un terreno prácticamente virgen, relativamente reciente, y de semejante calibre.
Kenins se definía como un “romántico contemporáneo” de gustos eclécticos que, más que cosas nuevas en la música, buscaba “nuevas formas de expresar viejas ideas”. Pero por más que puedan rastrearse, aquí y allá, afinidades con otros autores o estilos —desde Honegger al Lutoslawski de los años 60—, su música resulta profundamente original e identificable a poco que la conozcamos. La robustez y el dinamismo dominantes pero también la hondura desplegada en los episodios más sombríos o introspectivos, el empleo de texturas nítidas y orquestaciones siempre transparentes, el soberano manejo del contrapunto —la aparición de pasajes fugados no es infrecuente—, el protagonismo concedido a los instrumentos de percusión —que aportan un atractivo colorido— e incluso el uso ocasional de una aleatoriedad limitada hacen que la escucha de estas cuatro espléndidas sinfonías se convierta en una experiencia reveladora y gratificante, ajena a toda rutina.
Juan Manuel Viana
(Crítica publicada en el nº 386 de Scherzo, de julio 2022)