SANTIAGO DE COMPOSTELA / Ricardo Llorca estrena con éxito su ‘Oficio de Caminantes’
Santiago de Compostela. Auditorio de Galicia. 20-VII-2023. Real Filharmonía de Galicia; Coro «Angel Barja JJMM-ULE; Susana Cordón, soprano; José Luis Sola, tenor; Eva Guillamón, narradora; Fernando Buide, órgano; Alexis Soriano, director. Ricardo Llorca: Oficio de Caminantes.
Oficio de Caminantes fue un encargo que la Catedral de Santiago hizo al compositor Ricardo Llorca hace algo más de tres años. Como ocurrió a tantos otros proyectos en 2020, este se quedó varado en playa de nadie por la pandemia. Pero el tesón y el empeño de Ricardo Llorca han hecho que esta cantata viera, por fin, la luz en la ciudad para la que se concibió: Santiago de Compostela. Uno habla con conocimiento de causa, porque ha sido testigo del proceso de gestación y del parto de esta magnífica cantata, cuyo estreno mundial tuvo lugar anteayer en el Auditorio de Galicia. Sin embargo, la cosa no se queda en un mero estreno absoluto, y Oficio de Caminantes también se publicará en disco en uno de los grandes sellos discográficos —ese será otro parto que escucharemos dentro de unos meses—. Así, durante los últimos cuatro días, en Santiago de Compostela han tenido lugar los ensayos, la grabación, un flashmob en la Plaza del Obradoiro —la noche anterior al concierto— y el estreno mundial de la obra de Ricardo Llorca.
Los elegidos para grabar y estrenar Oficio de Caminantes han sido la Real Filharmonía de Galicia, el organista y compositor gallego Fernando Buide, el Coro “Ángel Barja” JJMM-ULE —que dirige Aitor Olivares—, la soprano Susana Cordón, el tenor José Luis Sola y la narradora Eva Guillamón. Todos ellos estuvieron dirigidos muy eficazmente por el maestro Alexis Soriano, uno de los directores de orquesta españoles más destacados, quien también dirigió la ópera Las horas vacías de Llorca en Lituania y en el Teatro Real de Madrid, en 2021.
Oficio de Caminantes es un homenaje a todos los peregrinos, en el que Llorca ha querido aunar las distintas tradiciones cristianas. Eso se nota en las melodías arcaizantes que evocan la tradición maronita o la de los coptos de Egipto, por ejemplo. También se pueden escuchar guiños sonoros al canto de batre típico de Alicante, tierra natal del compositor. Los textos están en español, latín y griego. La cantata se divide en doce partes: I Introito, II Congaudeant Catholici, III Monologo I, IV Tú, que del mar Galileo, V Veneranda Dies, VI Monólogo II, VII No te dejes por Venus vencer, VIII Kyrie, IX Agnus Dei, X Tercer monólogo, XI Benedicamus de Santiago y monólogos de Concha Llorca y XII Aleluya de Santiago. La mayoría de los textos están sacados del Codex Calixtinus, excepto los de los monólogos que se corresponden con las palabras de Benedicto XVI en su visita a la Catedral de Santiago de Compostela en 2010 (Monólogo I), la homilía del Papa Francisco en su primera misa como pontífice en la Capilla Sixtina el 14 de marzo de 2013 (Monólogo II), palabras del Papa Francisco en su Encíclica Laudato sí sobre el cuidado de la casa común (Tercer monólogo) y Diarios de Peregrinación de Concha Llorca Zaragoza (Monólogos de Concha Llorca).
En general, la cantata resulta muy agradable de escuchar. En ella se combinan secciones rítmicas que a uno le hacen muy difícil no seguir el compás con el pie o moviendo la cabeza al son de la música como, por ejemplo, en Veneranda Dies o Benedicamus Domino. Una obra muy equilibrada con pasajes instrumentales de sonoridades etéreas en las cuerdas, partes para orquesta y soprano, para orquesta y tenor, dúos de soprano y tenor, coro a cappella, coro con orquesta, coro con solistas… y texto declamado.
La soprano alicantina Susana Cordón hizo una excelente interpretación. Las partes de soprano son muy difíciles porque se mueven mucho en el passaggio, registro muy frecuentado por Ricardo Llorca, y requieren un extraordinario dominio de la técnica vocal. A esto se le añade el carácter melismático de las melodías que, igualmente, requieren un generoso vibrato en los abundantes trinos y una gran potencia de voz que permita realizar emocionantes crescendi junto con la orquesta. Cordón, en plena forma y con un bellísimo timbre, estuvo magnífica en el aria para soprano y orquesta No te dejes por Venus vencer. Y a la altura de la soprano estuvo también el tenor pamplonica José Luis Sola, quien interpretó un conmovedor y exigente Agnus Dei. Gran potencia de voz y muy buena proyección, así como un timbre penetrante, Sola se mostró seguro y con aplomo. Magnífico el dúo con Susana Cordón en Tú, que del mar Galileo así como el dúo final con el coro y la orquesta en Aleluya de Santiago.
Sin duda, la gran revelación fue el Coro “Ángel Barja”, con sede en León. En Oficio de Caminantes las partes del coro son muy exigentes y difíciles, sobre todo el bellísimo Kyrie a cappella con un emocionante acompañamiento de trompeta al final que sonó muy hermoso, interpretado por el solista Javi Simó. Otro momento estelar del coro es el Benedicamus de Santiago, que incluye a los propios solistas del coro. ¡Bravo por el coro!
No puede uno dejar de mencionar la impecable factura de Fernando Buide al órgano, instrumento esencial en esta obra. También cabe destacar los solos del concertino en el Agnus Dei acompañando a José Luis Sola. Y, por supuesto, la voz de la narradora Eva Guillamón.
Al final el público en pie lo reconoció con un caluroso aplauso cuando el compositor subió al escenario para saludar, arropado por todo el equipo que ha hecho posible que el Oficio de Caminantes de Llorca resuene por primera vez en el mundo. ¡Y que vengan muchas más!
Michael Thallium