Sancta Ovetensis: del archivo de la Catedral de Oviedo

SANCTA OVETENSIS
Obras anónimas y de Joaquín Lázaro de la Catedral de Oviedo. Jone Martínez, soprano. Forma Antiqva. Director: Aarón Zapico. WINTER AND WINTER 910283-2 (1 CD)
Desde que en 1980 publicara Emilio Casares su estudio y catálogo de la música en la Catedral de Oviedo durante el siglo XVIII se sabía de la riqueza, calidad y pujanza de la vida musical de la sede ovetense durante el siglo ilustrado. Una serie de excelentes maestros de capilla elevaron el listón de la música que allí se podía escuchar casi a diario, a la vez que se preocuparon también de nutrir los armarios del archivo musical con obras de los mejores maestros nacionales y extranjeros. Así se explica lo al día que en materia musical estaba el padre Feijoo desde el Convento de San Vicente de Oviedo, en el que residió desde 1709 hasta su muerte en 1764. Pero hasta el momento el mundo de la discografía apenas si le había prestado atención a este filón de buena música.
Uno de los maestros de capilla mejor representados en el archivo ovetense es Joaquín Lázaro, a pesar de que sólo pudo ejercer el cargo durante cinco años, entre 1781 y 1786, por mor de su temprano fallecimiento con 40 años. Su música se mueve con soltura entre los estilos galante y clasicista, y no desentona en absoluto en el contexto musical europeo. Se incluyen aquí una serie de arias para tiple y orquesta compuestas para diversas celebraciones litúrgicas. La escritura vocal es muy exigente en materia de agilidades y coloraturas, pero para eso está aquí Jone Martínez, poseedora de una de las más bellas voces de su cuerda en la actualidad y que, con su maestría en el fraseo y su capacidad de transmitir emociones con la voz, convierte la escucha de este disco en una pura delicia.
Forma Antiqva la acompaña con su habitual fuerza y energía, gustosa de contrastes dinámicos. Se incluyen varias piezas orquestales anónimas (músicas para procesiones), entre ellas un curioso concierto para violín y orquesta en el que Jorge Jiménez se excede en aspereza de sonido.
Andrés Moreno Mengíbar