Recuerdos a Gaztambide

Mi querido Joaquín: Me permito enviarte unas letras al Olimpo, donde me consta que habitas desde antes incluso de que un tumor hepático se te llevara de entre nosotros recién retornado de hacer las Américas, allá por 1870. Ya morabas en ese lugar al que pocos creadores llegan rodeado, no cabe duda, de esos compañeros de generación con quienes diste el espaldarazo a una forma de teatro musical que os encumbró y convirtió en garantes de la felicidad colectiva. Una obra colaborativa que vuestro irrepetible compañero Barbieri, “el ...