PERPIÑÁN / La poderosa originalidad del festival de creación Aujourd’hui Musiques
Perpiñán. Théâtre de l’Archipel (Salas Le Grenat, Le Carré, Verrière du Carré y Centre d’art contemporain). 12 y 13-XI-2022. La Main harmonique, Jean-François Heisser, Emilie Benterfa, Stéphanie Fontanarosa, Maguelone Vidal, Compagnie Intensités, Trio Montalba et al.
Para su trigésimo aniversario, el festival de creación musical Aujourd’hui Musiques, de Perpiñán refuerza su originalidad en el reducido círculo de festivales consagrados a la música contemporánea, y también su categoría como uno de los más abiertos. Algo marginal en sus comienzos, se convirtió más tarde en precursor del espíritu de los festivales que le siguieron, prescindiendo a veces de la obra escrita para proyectarse en el universo de la electrónica improvisada, o como actor de las evoluciones tecnológicas, y al mismo tiempo consagrando lo esencial de su programación a las partituras de más rigurosa elaboración. Performances, improvisaciones, obras interactivas, el vagabundeo de la electrónica que asocia cuerpos y sensaciones, todo ello se convirtió con este festival en un instrumento de creación imagen y sonido, en confluencia con músicas ‘actuales’ y ‘cultas’, desde los más antiguos (Janequin, Josquin) hasta el siglo XX, tanto los más accesibles (Ravel), como los más complejos (Lachenmann), e incluso al XIX romántico (Schubert).
Como de costumbre desde su implantación en el Théâtre de l’Archipel, en 2011, cada concierto está precedido de una cita de música de cámara. Este año se plantearon unos viajes, especialmente por parte de Emilie Benterfa y Stéphanie Fontanarosa en un programa de piezas para piano a cuatro manos del pianista turco Faxil Say, muy comprometido en la lucha contra el poder teocrático de Recep Tayyip Erdogan, pero también autor de una música retrógrada que no tiene reamente lugar en un festival como Aujourd’hui Musiques, sobre todo si lo comparamos con lo que proponía el trío formado por Séverine Paris (Clarinete), Fanny Kobus (viola) y Angéline Pondepeyre (piano), con obras de más auténtica expresividad, que celebraban el judaísmo centroeuropeo de compositores de la primera mitad del siglo XX, como Ernst Bloch y Marx Bruch…
Siempre en busca de espectáculos originales y creativos, Aujourd’hui Musiques presenta todo tipo de géneros musicales que estén dotados de creatividad. Así, el magnífico conjunto La Main Harmonique presentó el estreno de un programa de elevado aliento artístico, concebido a partir del suntuoso Chant des Oyseaux de Clément Janequin, que alternaba melodías del Renacimiento y canciones populares de nuestro tiempo, todo ello con brillante arreglo del compositor franco-griego Alexandros Markeas (nacido en 1965), que incluyó una de sus propias páginas, Empowerment. Presentan un tema grave, que se expresa también en proyecciones murales de textos sobre el devenir del planeta sujeto a las variaciones climáticas fruto de las poluciones industriales y humanas, mientras que los cantantes e instrumentistas viven literalmente las melodías que tocan y cantan con una precisión, un fulgor, un empuje de lo más comunicativo, lo mismo en el canto que en los instrumentos. Hay que congratularse por este importante trabajo, un logro de todos los participantes que tocan de memoria más que ochenta minutos de música, bajo la dirección del director de escena Michel Schweizer. Un conjunto de primerísima categoría que se desenvuelve lejos de los círculos tradicionales.
Aujourd’hui Musiques se vincula a la tradición de los grandes recitales de piano al invitar a un músico de los más comprometidos con la creación musical de nuestro tiempo, Jean-François Heisser. Intérprete privilegiado de Olivier Messiaen como director de orquesta, ejerciéndose en el piano especialmente con creaciones de Karlheinz Stockhausen y Philippe Manoury, refinado conocedor del repertorio hispánico, el pianista francés decidió poner su mirada sobre el compositor de la confesión íntima, el austriaco Franz Schubert (1797-1828) y sobre el mago del sonido y de la búsqueda de lo inaudito que es el alemán Helmut Lachenman (nacido en 1935), con dos obras de gran envergadura, ya que cada una de ellas supera la media hora, y como pieza de transición una página de la compositora franco-estadounidense Betsy Jolas (nacida en 1926) en forma de homenaje a Ravel. De la Sonata para piano nº 17 en Re mayor op. 53 D. 850 de Schubert Heisser exaltaba la alegría conquistadora, la radiante vitalidad. Compuesta en 1997-2000, dedicada a Yukiko Sugawara (de ahí la ‘y’ de Serynade, primera letra del nombre de la dedicataria, esposa del compositor, que la estrenó el 13 de febrero de 2000), la Serynade de Lachenman es una obra clave, una cumbre de la literatura pianística de la segunda mitad del siglo XX. Adopta la gran forma en un único movimiento, y se funda en elementos extraordinariamente diferenciados en el plano acústico, con notas destacadas que reclaman el uso intenso del tercer pedal, el “pedal tonal”, clusters de todas las formas y amplitudes, con pasajes rítmicos especialmente complejos. Todos los elementos que constituyen la obra están segmentados de forma que se concentren sobre una sonoridad particular. Jean-François Heisser, que ha trabajado la partitura junto con el autor, no ha hecho uso de la opción amplificada para no explotar más que los sonidos naturales. Su interpretación, fluida y lúdica, dio toda su potencia y su infinita diversidad a esta obra magistral, que tocó con una naturalidad sorprendente las dificultades de la partitura, con una calma y una seguridad que se confinaban en una fenomenal sencillez para una obra sin embargo llena de trampas en todos los sentidos, sean técnicos, sonoros, expresivos, virtuosos.
Como de costumbre, Aujourd’hui Musiques plantea durante toda la duración del festival exposiciones y animaciones multimedia. Este año fue la exposición de artes visuales Mirages & Miracles (Espejismos & Milagros) de Adrien M et Claire B, presentada en el Centro de arte contemporáneo de Perpiñán en un espacio sonoro del DJ Franck de Villeneuve, Tactile 4 decks. Esta exposición lúdica y creativa, en la que el visitante es el principal actor al desplazarse en medio de esculturas que se mueven, se despliega en una serie de instalaciones en forma de pequeños espectáculos en los que se diluye la frontera entre lo animado y lo inanimado, entre realidad y virtualidad. Otro proyecto multidisciplinar, ahora en el seno del Théâtre de l’Archipel, Verrièrre du Carré, Amour Néon, es una instalación sonora y luminosa realizada en el GRAME de Lyon por la compositora Annette Mengel, que, en tres etapas bajo los cascos, interroga nuestros comportamientos amorosos en aquel siglo XX a través de una atmósfera en la que el imaginario amoroso resulta parasitado por elementos del universo tecnológico.
Bruno Serrou