MILÁN / La matizada Turandot de Anna Netrebko
Milán. Teatro alla Scala. 25-VI-2024 Anna Netrebko, Yusif Eyvazov, Rosa Feola, Raul Gimenez, Vitalij Kowaliow, Sung-Hwan Damien Park, Chuan Wang, Jinxu Xiahou. Director musical: Michele Gamba. Director de escena: Davide Livermore. Puccini: Turandot.
Después de nueve años, La Scala ofrece una nueva puesta en escena de Turandot en el centenario de la muerte de Puccini, y en esta ocasión es quizás comprensible la decisión de adoptar la solución más común, es decir, el final de Alfano drásticamente recortado por Arturo Toscanini para las representaciones de 1926 y luego raramente presentado en su integridad. En el estreno del 25 de abril de 1926, Toscanini interrumpió la ópera tras la muerte de Liù, luego no se quiso renunciar a la última escena por mucho que resultara problemática debido a las limitaciones del texto del libreto y a la finalización de Alfano. Consciente de estos problemas, Toscanini realizó cortes discutibles que permitieron retomar lo más rápidamente posible los fragmentos de Puccini en la conclusión, al precio, sin embargo, de una simplificada rapidez en la difícil cuestión del “deshielo” de la Principessa di ghiaccio. La conclusión de Alfano, ahora también conocida en su totalidad, es menos esquemática, pero no convence. Tampoco el final reescrito por Luciano Berio, en varios aspectos valioso y sin duda más cercano a nuestro gusto, puede resolver el problema del carácter incompleto de Turandot.
En La Scala, el final de Berio fue dirigido por Riccardo Chailly en 2015; pero en el centenario de la muerte de Puccini se volvió a la tradición más convencional. En lugar de Daniel Harding, que canceló, se llamó a Michele Gamba, un director muy consciente de la modernidad de la escritura de Puccini en Turandot y de la complejidad de esta partitura, mientras que la nueva puesta en escena se confió a Davide Livermore, que también diseñó los decorados junto con Eleonora Peronetti y Paolo Gep Cucco. La representación parece estar en el extremo opuesto de la inteligente sobriedad que se admiró en 2015 con la dirección de Nikolaus Lehnhoff; la escena está abarrotada y llena de artificios: cito solo la idea de hacer aparecer junto a Turandot al fantasma gesticulante de la antepasada asesinada siglos antes. Desgraciadamente, la impresión es que estos expedientes responden a una espectacularidad bastante burda, y a veces arbitraria.
Las cosas están mejor desde el punto de vista musical, gracias a la dirección inteligentemente flexible de Michele Gamba, atento a la riqueza de la partitura, pero también a las necesidades de los cantantes, no todos del mismo nivel. Es de admirar la búsqueda de matices de Anna Netrebko (Turandot), la intérprete vocal más interesante. A su lado, Rosa Feola es una Liù intensa, pero Yusif Eyvazof como Calaf no va más allá de la sólida seguridad que le permite sostener algunas notas altas. Entre los comprimarios destacan los autorizados intérpretes de las figuras de los padres, Vitalij Kowaliow (Timur) y Raúl Giménez (el emperador Altoum). Los intérpretes de las tres máscaras, Sung-Hwan Damien Park, Chuan Wang, Jinxu Xiahou, son correctos, pero un poco frágiles y descoloridos. La prestación de orquesta y coro es digna de elogio.
Paolo Petazzi
(foto: Teatro alla Scala / Brescia – Amisano)
