(M.W.)
María Weissenberg era el prototipo de la profesionalidad, del compromiso con lo bien hecho y de la intransigencia con la incuria, pero también de la afabilidad y el buen humor. Políglota, conocedora como nadie del mundo musical, su labor como relaciones públicas del Teatro Real fue insuperable, así como su colaboración con todo tipo de actividades complementarias de naturaleza didáctica como cursos, encuentros y conferencias. En los últimos años había creado, junto a Susana Lozano, la empresa musarchiv.com, generadora de páginas web paradigmáticas como las de Teresa Berganza, Alberto Zedda o la de su propio padre, el legendario pianista Alexis Weissenberg. Su sinceridad, su entusiasmo y su cariño suponen un legado inmaterial inestimable para quienes tuvimos la fortuna de gozar de su amistad, de su ayuda y de su generosidad en el trabajo: jamás podremos olvidar su excepcional ejemplo y su amorosa e ilimitada entrega.
José Luis Téllez