La Ópera de Viena sube a escena por primera vez en su historia una ópera compuesta por una mujer
Los vientos del cambio llegan incluso a la ultra-conservadora Ópera de Viena. El próximo 8 de diciembre subirá a sus escenarios, por primera vez en la historia del coliseo vienés, una ópera compuesta por una mujer. El acontecimiento promete levantar ampollas también por el perfil de la compositora elegida, Olga Neuwirth (Graz, 1968), enfant terrible de la música contemporánea austriaca (y no sólo). Junto a sus paisanos Thomas Bernhard, Elfriede Jelinek y Michael Haneke, Neuwirth es de esos artistas que buscan sacudir la conciencia tranquila del público, sembrando en sus obras elementos incómodos, inquietantes y hasta repulsivos.
No es la primera vez que Neuwirth recibe un encargo de la Ópera de Viena. En 2004 hubo un primer intento, que naufragó cuando la dirección del teatro rechazó el libreto presentado por la compositora: un texto de Elfriede Jelinek (precisamente) sobre casos de abuso infantil por parte de un médico nazi. En esta nueva ocasión, Neuwirth ha optado por un texto más “clásico”, pero no menos peliagudo: la novela Orlando de Virginia Woolf. Publicado en 1928, el libro de Woolf se inspira en la figura de su amante (y también escritora) Vita Sackville-West, y trata temas prohibidos para la época como la homosexualidad o o incluso la transexualidad, a través de un(a) protagonista que va cambiando de sexo a través de los siglos.
El estreno, ya de por sí histórico, del Orlando de Neuwirth promete sin duda agitar conciencias.