LIBROS / Josep Lluís Galiana analiza la música actual desde una clave valenciana

JOSEP LLUÍS GALIANA: Tiempo de reverberación. Una aproximación histórica a la música experimental valenciana en el contexto internacional y otros escritos sobre música y política. Prólogo de Joan Gómez Alemany. EDICTORÀLIA (Valencia, 2022). 288 págs.
«Saxofonista, improvisador, escritor y editor, he pasado de coordinar entre los años 1998 y 2013 las actividades artísticas, culturales y sociales del Club Diario Levante, foro de referencia para la cultura contemporánea durante más de dos décadas perteneciente al diario Levante-El Mercantil Valenciano, a cruzar al lado oscuro de la vida azarosa, autogestionaria del artista freelance en este país. También a publicar mis propios trabajos etnomusicológicos, literarios y poéticos, y acabar fundando una editorial (EdictOràlia Llibres i Publicacions) y un sello discográfico (Liquen Records), interesado en difundir las músicas improvisadas y experimentales y en dar a conocer los procesos creativos contemporáneos de artistas destacados del actual panorama musical nacional e internacional. Me van a permitir, pues, que como conocedor de la escena artística, musical y experimental valenciana de los últimos treinta años continúe conjugando estas páginas en primera persona, que mis propias experiencias sirvan de sustento narrativo y que les haga llegar algunas reflexiones al objeto de abrir un debate alrededor de lo acontecido en esta última etapa. Una etapa histórica que, como ya hemos avanzado, ha estado y sigue estando marcada por el desgarro económico, la inestabilidad política y social, la incertidumbre climática y los permanentes y continuos cambios tecnológicos».
Con estas palabras (aunque ya avanzado el libro, en su página 76) se presenta Josep Lluís Galiana a los lectores de Tiempo de reverberación. Una aproximación histórica a la música experimental valenciana en el contexto internacional y otros escritos sobre música y política, un nuevo volumen que se suma a la ya dilatada bibliografía que Galiana lleva publicado en los últimos años, con una mención muy especial para los libros que, en EdictOràlia, recopilan sus numerosos artículos, críticas y ensayos: verdaderas brújulas para comprender los derroteros musicales, ya no sólo de Valencia, sino del conjunto de España y Europa en las últimas décadas.
Y es que, si algo caracteriza a estos escritos, es el que, desde una primerísima persona (la de quien ha protagonizado tantos frentes como Galiana nos detalla en el comienzo de esta reseña), éstos no cesan de poner en perspectiva las cuestiones de índole más local con las corrientes transnacionales que han condicionado la escena musical contemporánea: desde sus claves económicas a las puramente interpretativas, pasando por cuestiones tan recurrentes e importantes en el pensamiento de Josep Lluís Galiana como las referidas a la programación musical, a los debates de poder entre música oficial y periférica (con una atención preferente para la improvisación libre y la electrónica) o al reparto de la inversión pública en el ámbito cultural (siempre analizado desde dichas cuestiones relacionadas con las estéticas dominantes y los imaginarios de poder: aspectos en los que Galiana no escatima críticas ni atenúa los dardos de sus palabras, buscando llamar a cada cosa por su nombre y desvelar los intereses que mueven tantos hilos musicales, de forma a menudo aviesa, interesada y torticera).
Estamos, así pues, ante reflexiones tanto en tiempo real como en una primera persona histórica que dialoga con el panorama local e internacional en los tres grandes bloques en los que se divide Tiempo de reverberación: I. Una conferencia y un ensayo sobre la música experimental valenciana (1975-2018); II. Escritos sobre música y política; y III. Epílogo; siendo el segundo bloque el más extenso del libro.
A estas tres partes se une un brillante prólogo a cargo de Joan Gómez Alemany, compositor, escritor y artista audiovisual valenciano que se ha convertido en uno de los más directos colaboradores del propio Galiana; de ahí, la lúcida comprensión que nos comunica de las cuestiones principales de este libro, destacando su «propuesta ecléctica y multidisciplinar», así como la pertinencia que a los escritos de Galiana confiere su amplia experiencia como músico y gestor cultural, poniendo de relieve cómo dicha experiencia otorga vivacidad y credibilidad a este volumen, además de la calidad ensayística, literaria y filosófica del mismo.
Con muy buen criterio, para Joan Gómez estamos ante un libro marcado por los elementos de heterogeneidad y homogeneidad, pues, si bien sus páginas nos lanzan hacia múltiples direcciones, la fuerte estructuración analítica de Josep Lluís Galiana lo dota de coherencia como artefacto crítico, destacando Gómez Alemany cómo lo político informa, una y otra vez, las reflexiones de Galiana, así como su explícita querencia por aquellas manifestaciones artísticas que se encuentran en los márgenes. De este modo, lo experimental, lo interdisciplinario y lo contracultural son, para Joan Gómez, algunos de los temas más relevantes de este volumen, así como de los más necesarios, puesto que conforman lo que solemos denominar «historia no oficial», pero no por ello menos historia y que precisa, igualmente, de ser contada. Fruto de dicho posicionamiento, destaca Joan Gómez la necesidad de politizarse a la que nos impele Tiempo de reverberación, así como la importancia de que esos márgenes sean los que, más perentoriamente, lleven a cabo tal grado concientización, para así empoderarse y lograr unos más altos niveles de transformación de lo social desde y con lo musical, llamándonos a un discurso no sólo utópico, sino práctico. Conociendo la carrera artística tanto de Josep Lluís Galiana como de Joan Gómez Alemany, es evidente que no estamos ante unos escritos, ni mucho menos, panfletarios, sino ante la racionalización, en negro sobre blanco, de un trabajo de décadas en las claves que en su estupendo prólogo desgrana el compositor valenciano.
Entrando, de forma sintética, en el grueso del libro, el primer bloque nos invita a un recorrido por la música emergente, experimental y exploratoria en Valencia desde la Transición hasta nuestros días: mapa del territorio histórico que lejos está de quedarse en lo local, de forma que las páginas inaugurales del primer ensayo se convierten en toda una historia condensada de la música electrónica, pasando por el texto de Josep Lluís Galiana desde Pierre Schaeffer a John Cage, así como las principales innovaciones y estudios de música electroacústica. Tras abrir ese plano más global, Galiana analiza los avances españoles y valencianos, partiendo de aquéllos a los que denomina «visionarios»: Juan García Castillejo, Eduardo Panach Ramos y José Val del Omar.
Desde estos precursores y hasta la creación de los primeros laboratorios de música electroacústica en Valencia (el LEA de su Conservatorio Superior, en 1995), Galiana rescata de forma exhaustiva las principales aportaciones tanto técnicas como artísticas, publicaciones bibliográficas, festivales y las sucesivas generaciones de compositores que se han hecho cargo de dicho desarrollo. Lo que parecía una situación halagüeña, marcada por un continuo progreso tecnológico y artístico, se topa con una crisis en 2008 cuyos estragos son someramente analizados a todos los niveles, poniendo Galiana el acento no tanto en el descalabro económico que supuso la gran crisis financiera para el mundo de la música, sino en el fracaso del modelo mismo por el que éste se venía rigiendo, con la progresiva depauperación de la escena oficial y la feliz emergencia de movimientos contraculturales que han ofrecido una cierta continuidad en muchas esferas desatendidas por las instituciones públicas. Una detallada cronología sirve a Galiana para escalonar, desde 2007 hasta 2018, los más importantes acontecimientos que pautaron el hundimiento de todo un sistema (marcado en la Comunidad Valenciana por los grandes fastos institucionales) y la aparición de brotes verdes en direcciones divergentes (claro que lejos estábamos de saber, en 2018, lo que dos años después se nos vendría encima; primero, con la pandemia del coronavirus; después, con la invasión de Ucrania, en una concatenación que ha añadido nuevos estragos a los aquí descritos).
Los sucesivos textos englobados en el segundo bloque recogen ponencias y artículos de prensa en los que Galiana se extiende en muchos de los temas ya avanzados, adentrándose desde en las partidas presupuestarias de las administraciones públicas a las cuestiones de género en el ámbito musical. Son textos que, además de trazar reflexiones más abstractas, descienden al análisis de datos concretos derivados de las programaciones y de la vida musical; especialmente, valenciana, lo que evidencia que el trabajo ensayístico de Galiana no está dictado desde el apriorismo, sino desde un estudio muy minucioso de quien ha protagonizado una realidad musical que conoce de primera mano. Artículos como La música también necesita un rescate (2015) evidencian los vaivenes de las instituciones en función de los colores políticos que al frente de éstas se alternasen; así como la necesidad de una dirección más sólida emanada desde criterios más propiamente artísticos y musicales.
Otros textos, como Proyecto: Somos los que escuchamos. Por una cultura musical valenciana más democrática, compartida y participativa, enmarcada en la excelencia y con proyección internacional (2017) o De la construcción y disfrute de un nuevo mapa sonoro valenciano (2017), son de índole más técnica y local, pero no menos reveladores de lo que se cuece en nuestras comunidades autónomas a nivel musical.
Por lo que al Epílogo se refiere, éste se convierte en una suerte de síntesis del propio libro, así como en un explicitar las motivaciones habidas detrás de los textos (especialmente reveladoras en el caso del Proyecto: Somos los que escuchamos), destacando Galiana cómo este libro es una aventura reflexiva a la que podemos acceder de forma no necesariamente lineal, invitándonos cada uno de sus capítulos a la relectura en diversos momentos, pues en muchas ocasiones, por desgracia, lo aquí denunciado no ha dejado de reverberar año tras año (cuando no ha empeorado todavía más).
Completa Tiempo de reverberación una sustanciosa bibliografía, así como un nutrido índice onomástico y las traducciones al castellano de los textos en valenciano, ya que el volumen es bilingüe, al respetar el idioma original de cada ponencia y artículo. Una muy aquilatada selección de fotografías ilustra estos textos, redondeando una publicación tan cuidada como a las que nos acostumbra EdictOràlia, así como poderosamente reflexiva: toda una invitación a repensar la actualidad musical.
Paco Yáñez