Fallece Fèlix Millet, expresidente del Palau de la Música de Barcelona condenado a diez años de cárcel por desfalco
Fèlix Millet (Barcelona, 1935), el que fuera presidente del Palau de la Música de 1978 a 2009, falleció el ayer miércoles, a los 87 años. El empresario catalán, que también presidió la Fundació Orfeó Català-Palau de la Música Catalana desde 1990, dimitió de estos dos cargos tras confesar el desvío de 2.290.000 euros de los fondos de la institución. En 1983, Millet impulsó el Consorci del Palau de la Música (formado por la Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona y la Diputación de Barcelona), al que se sumó en 2001 el Ministerio de Cultura, y en 1990 se creó la Fundació Orfeó Català y se emprendió una ampliación del Palau de 1999 a 2004.
El juicio por el desvío de fondos de la Fundació Orfeó Català-Palau de la Música Catalana, conocido como “caso Millet” o “caso Palau”, empezó el 1 de marzo de 2017, con un sumario de más de 60.000 folios. Tras un juicio de cuatro meses y medio por el desfalco, en 2017 fue condenado a nueve años y ocho meses de prisión por cuatro delitos distintos: malversación y apropiación indebida, tráfico de influencias, blanqueo de capitales y delito contra Hacienda Pública. La sentencia también incluía una multa de 4.100.000 millones de euros y la obligación de devolver de manera conjunta con el resto de los condenados 23 millones de euros a las estructuras del Palau. Hasta noviembre de 2022, la Audiencia de Barcelona había recuperado 12 de esos 23 millones.
El fallo, que el Tribunal Supremo confirmó en 2020 haciendo firme la sentencia, supuso la entrada en la cárcel de Brians 1 de Millet en junio de 2020, donde ingresó voluntariamente el último día del plazo que tenía para hacerlo. Antes de entrar en prisión, solicitó el indulto alegando su avanzada edad y que padecía enfermedades graves, pero el Gobierno lo rechazó, al igual que ocurrió con su solicitud que cursó la mano derecha de Millet, Jordi Montull.
Una vez en la cárcel, Millet pidió el tercer grado apelando a su edad y a su delicado estado de salud, pero la jueza de vigilancia penitenciaria lo rechazó hasta finales de octubre de 2022. Se lo concedió luego por enfermedad incurable, quedando en semilibertad, si bien siguió ingresado en el Hospital Penitenciario de Terrassa (Barcelona) hasta enero de 2023, cuando fue trasladado a una residencia con asistencia médica elegida por su familia.