El Liceu quiere revolucionar la forma de ver la ópera
El coliseo barcelonés pone en marcha un abono digital que permitirá ver las obras desde distintos puntos de vista, incluidos el foso y el backstage.
La ópera es emoción, pasión y también misterio. Mucho hay de mágico en ese ritual al que asistimos, devotos y expectantes, desde la oscuridad de la sala. Pero ahora, todo eso podría experimentar un giro radical. ¿Qué pasaría si, de pronto, dejáramos de ser meros espectadores y nos convirtiéramos, casi, en parte de una función? ¿Volveríamos a ver con los mismos ojos una representación de ópera si también pudiéramos situarnos en el lugar del regidor, en el de un músico de la orquesta o incluso en el de sus protagonistas?
Todo eso (y más) es lo que está previsto que ocurra a partir del próximo 5 de noviembre, cuando el Gran Teatre del Liceu ponga en marcha su nuevo proyecto digital, Liceu+ Live, una iniciativa que aspira a ir más allá de la retransmisión on line de algunos títulos de su programación. La ambición no es, ni más ni menos, que “revolucionar la manera de ver la ópera”, en palabras del director general del teatro, Valentí Oviedo.
Para ello, el coliseo lírico barcelonés pondrá al alcance de los aficionados una suscripción digital que permitirá disfrutar de cinco títulos de temporada —Il trovatore, Il trittico, Tosca, Macbeth y Manon para el presente curso—, en dos opciones de visionado: la primera, en riguroso directo y, unos días después, en una versión especial editada que incluirá novedosas opciones, como seguir la partitura mientras se desarrolla la obra o cambiar el punto de vista, situándose en el foso de la orquesta o tras las bambalinas.
Accesibilidad y cercanía
Con unos objetivos bien definidos —ofrecer máxima accesibilidad al género, superando fronteras territoriales y económicas; internacionalizar la programación artística y enriquecer la experiencia operística— el proyecto Liceu+ Live es la gran apuesta de la temporada liceística 2022-23, todavía bajo el paraguas de la celebración de su 175º aniversario.
“Estamos frente a una nueva manera de ver y vivir la ópera, con características únicas que nos permitirán romper barreras y que hacen de esta plataforma una iniciativa única en su género”, afirma Oviedo. “A partir de ahora, la distancia, las capacidades, el precio o el conocimiento nunca volverán a ser un impedimento para que las personas puedan aproximarse a este arte total”, añade el director del Liceu.
Las novedades que singularizan este proyecto y que lo diferencian de la oferta de otros teatros de ópera del mundo llegarán incluso antes de que se levante el telón. La emisión en directo contará con un presentador o maestro de ceremonias que en los momentos previos al inicio de la función, así como en los entreactos y al término del espectáculo, ofrecerá información relevante de la obra y entrevistará a quienes la hacen posible, artistas, creadores o técnicos. La ópera se podrá seguir subtitulada en cuatro idiomas —castellano, catalán, inglés y la lengua original del libreto— y a lo largo de la emisión se creará un chat en directo, que contará con un moderador y permitirá que espectadores de cualquier lugar del planeta puedan comentar la función o formular preguntas relacionadas con el espectáculo. “A mí me resulta especialmente motivador que personas de diferentes países y continentes puedan comentar en directo una ópera que está teniendo lugar en Barcelona, en el Liceu y así, entre todos, crear una comunidad de Liceu Opera Lovers o Liceístas Digitales”, afirma, con entusiasmo, Oviedo.
Pero las singularidades más importantes llegarán unos días después, cuando el teatro suba a la red una versión especial editada del montaje, que estará disponible durante dos temporadas e incorporará funcionalidades inéditas en este tipo de propuestas. Una de ellas será la posibilidad de seguir la partitura mientras avanza la representación, así como activar los comentarios con que los directores de escena y de orquesta destacarán momentos clave de la obra. Por ejemplo, un pasaje de especial dificultad vocal o una singularidad técnica o conceptual del montaje.
Pero la función que posiblemente, suscitará más curiosidad será la visualización multicámara, la cual permitirá al espectador abandonar la mirada unidireccional clásica y acceder a otros puntos de vista. “Los usuarios podrán ‘jugar’ a ser el director musical, a seguir la orquesta desde un primer plano, ser testigos de los comentarios que se hacen en regiduría o de los cambios de escenografía e incluso, vivir la magia de los momentos de entrada y salida a escena de los cantantes”, avanza Oviedo, en relación con esta propuesta que justifica, por sí sola, el eslogan promocional de la iniciativa.
Selección lírica
La selección de las obras incluidas en este abono digital no es casual. “El abono Liceu+ LIVE no será un repositorio de los títulos que el teatro pueda tener en disposición, ni una biblioteca de ópera”, se apresuran a señalar los responsables de la institución. “Lo que queremos es ofrecer una temporada digital de primer nivel a través de la cual se explique el proyecto artístico del teatro”, añaden.
De ahí que la curaduría de la iniciativa esté en manos del director artístico de la institución, Víctor García de Gomar. “La elección de los títulos está pensada para responder a nuestro ideario artístico, poniendo especial atención en las producciones propias y en las propuestas más destacadas de la temporada. Se trata de escoger aquellas óperas que mejor nos explican en la novedad, en el magnetismo de la noticia que generan y en la apuesta por el talento”, comenta García de Gomar, quien adelanta que, en concepto y en número de títulos, este modelo se mantendrá “al menos las tres próximas temporadas”.
Así, la temporada digital comenzará con Il trovatore de Verdi [Foto superior], en el impactante montaje que el artista residente de la casa, el ‘furero’ Àlex Ollé, ambientó en la I Guerra Mundial para las óperas de París y Ámsterdam. La emisión en directo corresponderá a la función del 5 de noviembre, con las voces de la madrileña Saioa Hernández como Leonora y el italiano Vittorio Grigolo en el rol de Manrico, los mismos protagonistas del día del estreno (27 de octubre). La versión editada estará disponible a partir del día 17.
Tomará el relevo Il trittico de Puccini, que se proyecta como uno de los momentos más ambiciosos del curso. Los días 3 (emisión en directo) y 15 de diciembre (versión editada), los aficionados podrán disfrutar de esta propuesta que llega con duplicado sello femenino: la prestigiosa batuta de la finlandesa Susanna Mälkki y la dirección escénica de la holandesa Lotte de Beer. “Contaremos con una concentración única de voces, entre ellas Lise Davidsen (Giorgetta, Il tabarro), Ermonela Jaho (Suor Angelica) y Daniela Barcellona (Zita, Gianni Schichi), además de ese doble concepto creativo femenino, que otorgarán a estas obras un atractivo muy especial”, indica García de Gomar.
El primer título de 2023 será Tosca de Puccini, en el esperado y también controvertido montaje del sevillano Rafael R. Villalobos que rinde homenaje al universo de Pier Paolo Pasolini; el mismo del que se retiraron, hace unos meses, Roberto Alagna y Aleksandra Kurzak. La transgresora producción, una colaboración entre el Liceu, el Théâtre Royal de la Monnaie, el Teatro de la Maestranza y la Ópera de Montpellier, podrá verse en directo el 16 de enero y en versión editada a partir del día 26.
El 25 de febrero —y en versión editada a partir del 9 de marzo— llegará el segundo título verdiano, Macbeth. Será el estreno absoluto de una nueva producción que llevará la firma escénica de otro artista catalán, Jaume Plensa, y la dirección musical del titular de la casa, Josep Pons. La función escogida para dar el salto al universo digital cuenta con las voces de Luca Salsi (Macbeth) y Sondra Radvanovsky (Lady Macbeth).
La primera temporada digital del Liceu se completará con Manon de Jules Massenet. “Hemos escogido este título porque permitirá al público disfrutar de una gran pareja protagonista, Nadine Sierra y Javier Camarena, que nos ofrece el aliciente añadido de su debut en el rol de Des Grieux, además de la presencia en el podio de Marc Minkowski”, explica el director artístico del teatro. La emisión en directo será el 30 de abril y la versión editada estará disponible a partir del día 11 del mes siguiente.
Experiencia única
El abono Liceu Plus+ LIVE tiene un coste único de 60 euros por temporada —30 euros para el público que ya está abonado al teatro— y será accesible desde cualquier navegador web a través de la plataforma audiovisual del teatro, Liceu+. También cuenta con una app gratuita, descargable desde los stores de IOS y Android, y es compatible con cualquier smart tv, vía cable HDMI, dispositivo Chromecast o similar. Las condiciones técnicas también apuestan por ser impecables: sonido compatible con Dolby 5.1 y siete cámaras 4K que seguirán todo el movimiento escénico. “Tener un buen equipo de imagen y sonido es lo ideal para garantizar la calidad de la experiencia”, recomienda García de Gomar.
Ante la duda —más que lógica— de si la nueva fórmula pudiera implicar una pérdida presencial de público, los responsables del Liceu son contundentes. “La experiencia de asistir a una función de ópera es única y no existe plataforma digital que la sustituya como tal. La comunión entre público y escena siempre generará momentos de emoción indescriptible que el audiovisual no puede sustituir. Pero también sería extraño que, con la tecnología que tenemos actualmente, no utilizáramos estos recursos para mejorar aún más la vivencia operística. Y sería aún más extraño privar de esta experiencia a quienes, por el motivo que sea, distancia física, dificultad de desplazamiento o precio, no pueden venir al teatro”, argumenta Oviedo.
Por su parte, García de Gomar considera que “a pesar de la fuerza que está cogiendo lo digital, no estamos en condiciones de vaticinar un canibalismo. Aquella experiencia en directo que nos golpea de una manera extraordinaria, ese momento del que luego hablaremos a nuestros hijos, no tiene equivalente. Pero también es verdad que este es un género enormemente caro que necesita de una nueva vida y de una nueva lectura”.
De hecho, una de las claves que, para Oviedo, garantiza el éxito del proyecto reside en que ha sido concebido para responder a necesidades reales de los espectadores. “Hemos escuchado muy activamente al público del Liceu para intentar dar respuesta a todas aquellas dudas y preguntas que se suscitaban de manera cotidiana y natural aquí en la sala: personas que vienen con la partitura en la mano, aficionados que debaten por el significado de la puesta en escena… Dar respuesta a ello es lo que hace única a esta plataforma”, argumenta el director general, antes de rematar que, por eso, “Liceu+ Live será un complemento perfecto para todos aquellos que ya viven la ópera en directo desde la sala, así como una oportunidad única para quienes no pueden venir presencialmente al teatro”. ¶
Ana María Dávila
De la platea al sofá
La retransmisión digital de conciertos o funciones de ópera no es nueva. Hace ya tiempo que los principales coliseos líricos y sinfónicos del mundo han puesto en marcha este tipo de plataformas, cuya proyección real quedaría plenamente de manifiesto con la crisis de la Covid-19.
En el caso del Liceu la ambición por saltar las barreras del tiempo y el espacio se remonta al momento de su reinauguración, tras el incendio que lo destruyó en 1994. “Cuando el teatro reabrió puertas, el 7 de octubre de 1999, lo hizo convencido de que ese nuevo Liceu tenía que ser el Liceu de Tots (Liceu de todos). Es decir, que lo que pasaba arriba del escenario no podía estar reservado a unos cuantos. La ópera tenía que traspasar las paredes del edificio de las Ramblas”, apunta Oviedo.
Fue así como, dos años después, el 18 de diciembre de 2001, el coliseo lírico barcelonés se convirtió en uno de los primeros teatros del mundo en proyectar una ópera en directo a un cine. El título escogido fue La traviata, que también se retransmitió a través de una red de Internet, entonces experimental, a cuatro universidades catalanas. Desde entonces, el teatro ha ofrecido por esta vía otras 23 producciones, que incluyen títulos como Lucia di Lammermoor, Macbeth, Rigoletto, Un ballo in maschera o Aida, las cuales han sido vistas por más de 250.000 espectadores en unos trescientos países. Por su parte, el proyecto pedagógico Òpera Oberta (Ópera Abierta) se extendería posteriormente a 31 universidades de toda España y seis de Latinoamérica.
En 2015 llegaría el Liceu a la fresca (Liceu al fresco), una iniciativa estival que ha llevado ópera en directo y al aire libre a más de trescientas poblaciones de Cataluña y del resto España, con más de 200.000 espectadores en cada edición.
El estallido de la pandemia no hizo más que acelerar los proyectos digitales del teatro, que en aquellos días de confinamiento convirtió en viral el vídeo #HoraDeVencer, una pieza audiovisual multipantalla en la que 142 artistas interpretaron y grabaron, a través de video conferencia, el Nessum dorma de la ópera de Puccini Turandot.
Finalmente, en abril de 2021, el teatro presentó su nueva plataforma digital, Liceu+, destinada a ofrecer, en abierto con registro previo, contenidos específicos relacionados con la temporada artística, como entrevistas en profundidad, reportajes, podcasts, conferencias o ruedas de prensa, además de conciertos y recitales seleccionados.
Ahora, con el abono digital Liceu+ LIVE el coliseo barcelonés quiere dar un paso más y dejar de ser el “Liceu de todos” para convertirse en un “Liceu per a tohom”, es decir, un “Liceu para todos”. ¶
[Foto superior: Il trovatore. ©Ruth Walz]