‘Don Carlo’ inaugura la temporada de la Scala de Milán en un montaje de Lluís Pasqual
Como es tradición, el 7 de diciembre –día de San Ambrosio, patrono de Milán– es la fecha escogida por el Teatro alla Scala para inaugurar su temporada lírica. Este año, el titulo encargado de abrir la temporada 2023/2024 es Don Carlo de Giuseppe Verdi, en la versión en cuatro actos que el compositor preparó en 1884 precisamente para el coliseo milanés. La representación empieza a las 18:00 horas y será retransmitida en directo por el primer canal de la televisión pública italiana (Rai1).
Don Carlo tendrá en el foso a Riccardo Chailly, director musical de la Scala, y contará con la dirección escénica de Lluís Pasqual. Los decorados corren a cargo de Daniel Bianco, el vestuario es de Franca Squarciapino, la coreografía de Nuria Castejón y el vídeo de Franc Aleu.
El reparto vocal incluye a Francesco Meli (Don Carlo), Anna Netrebko (Elisabetta di Valois), Michele Pertusi (Felipe II), Elīna Garanča (Princesa de Éboli), Luca Salsi (Marqués de Posa) y Jongmin Park (Gran Inquisidor), quien sustituye a última hora al indispuesto Ain Anger.
Para Riccardo Chailly, Don Carlo es la culminación de una reflexión sobre el poder que se extiende a lo largo de tres aperturas de Temporada, tras Macbeth de Verdi (2021) y Boris Godunov de Musorgski en 2022. Chailly, que ya dirigió este título verdiano en Ámsterdam en 2010, atesora en su recuerdo las ediciones dirigidas en la Scala por Claudio Abbado en 1968 y 1977, cuyos ensayos tuvo la posibilidad de seguir, pero también aprovecha su estudio directo de los manuscritos puestos a su disposición por Ricordi. Como en la edición de Abbado, la introducción al monólogo de Felipe II estará confiada a la fila de violonchelos de acuerdo a la partitura y no al violonchelo solo como es costumbre.
La producción de Lluís Pasqual [en la foto] propone una escenografía única que se transforma sin interrumpir el desarrollo de la acción en los diferentes espacios previstos por el libreto gracias a la espectacular alternancia de colosales elementos escénicos. Para recrear la atmósfera suspendida entre el ambiente eclesiástico y el secular, el Pasqual y el escenógrafo Daniel Bianco hacen referencia al uso del alabastro en las ventanas de los edificios religiosos como civiles y, en particular, al gran ventanal de la Colegiata de Santa María la Mayor en Toro.
(foto: Brescia e Amisano / Teatro alla Scala)