BREMEN / Marc Mikowski ofrece un deslumbrante ‘Murciélago’ en el Musikfest de Bremen
Bremen. Die Glocke. 6-IX-2024. Rachel Willis-Sørensen, Alina Wunderlin, Christoph Filler, Magnus Dietrich, Annelie Sophie Müller, Dominic Sedgwick, Michael Kraus, Manfred Schwaiger. Dirección musical: Marc Minkowski. Johann Strauss: Die Fledermaus (versión de concierto)
Entre los artistas invitados que mantienen una relación estrecha con la ciudad hanseática y que desde hace treinta años regresan habitualmente al evocador escenario de Die Glocke, destaca Marc Minkowski, galardonado en 2005 con el Premio del Musikfest Bremen. Este año, el director francés dedicó su atención a Die Fledermaus (El murciélago), obra cumbre de Johann Strauss, estrenada en Viena hace 150 años. Tras su desconcertante y fallida lectura de Hoffmann en el reciente Festival de Salzburgo, en Bremen disfrutamos a Minkowski en su máximo esplendor. Aquí, no estuvo al frente de la Filarmónica de Viena —como en el festival austriaco—, sino que lideró a su propia agrupación, Les Musiciens du Louvre, que él mismo fundara en 1982. En la obertura, cargada de energía, con el encanto del vals y un vertiginoso crescendo final, la noche arrancó con fuerza, provocando la ovación del público en repetidas ocasiones. La versión en concierto fue una auténtica delicia, repleta de humor, tensión y ritmo, con un brillante reparto que, gracias a su determinación dramática y la expresividad de sus gestos, logró recrear una atmósfera propia de un espectáculo teatral. Tras el exuberante dúo Brüderlein und Schwesterlein, Minkowski sorprendió con una vibrante interpretación de la straussiana Russische Marsch-Fantasie, una obra de energía concentrada y gran tensión. Y, por supuesto, no se privó de dirigir también la polca Unter Donner und Blitz, desplegando un vibrante torrente sonoro.
Rachel Willis-Sørensen destacó como Rosalinde, con una suntuosa voz de soprano, de un timbre embriagador y una plenitud vocal arrolladora. Su aparición en el segundo acto fue deslumbrante, vestida con una túnica plateada que parecía fundirse con su figura, el atuendo perfecto para su interpretación de la czarda, rebosante de temperamento y cargada de una sensualidad que no dejó a nadie indiferente. A su lado, Alina Wunderlin ofreció un coherente contraste en el papel de la vivaz Adele, celebrada por los couplets que interpretó con desparpajo y gran dominio de la coloratura, haciendo uso de su amplio registro. El barítono austriaco Christoph Filler brilló como Eisenstein, con una voz profunda y rica en matices, y una notable presencia escénica. Por su parte, el joven tenor alemán Magnus Dietrich promete un futuro brillante. Su Alfred lució con brillantez en los agudos, combinando una interpretación dinámica con la soltura suficiente para interpretar, desde su celda, pasajes de Lohengrin y Cavaradossi sin esfuerzo. Annelie Sophie Müller, sustituyendo a Marina Viotti, encarnó a Orlofsky con una voz de mezzosoprano de tonos profundos, dotando de una convincente identidad andrógina al personaje travestido. Dominic Sedgwick, con su cálida voz de barítono como Dr. Falke, Michael Kraus, de voz autoritaria como el alcaide de la prisión, y el vienés Manfred Schwaiger como el divertido Frosch, completaron el reparto brillantemente.
Bernd Hoppe
