Sale a la luz una correspondencia inédita entre Verdi y Teresa Stolz
La correspondencia de Verdi no deja de deparar sorpresas. Después de las treinta y seis cartas al libretista Salvatore Cammarano (a punto de ser subastadas en 2017 y adquiridas por el Ministerio de Cultura italiano) y las catorce dirigidas al empresario Alessandro Lanari (subastadas al año siguiente), la revista Classic Voice revela en su número de enero la existencia de 155 cartas –en su mayoría inéditas– que el compositor envió a Teresa Stolz y que los herederos de la cantante pusieron a la venta hace unos años. La revista ha tenido la oportunidad de examinarlas antes de que un anónimo comprador se hiciera con ellas.
La soprano checa Teresa Stolz (1834-1902) tuvo un lugar importante en la biografía verdiana. Fue la primera Leonora en el estreno italiano de La forza del destino y también la primera Aida en Italia, además de la primera intérprete de la Misa de Réquiem. Pero los caminos que entrecruzaron las vidas de Verdi y Stolz no fueron sólo artísticos. Ya en vida del compositor, se rumoreó que la cantante pudo ser la amante de Verdi, veinte años mayor que ella.
Durante décadas los musicólogos han intentado dilucidar hasta dónde llegó esta relación sin llegar a una conclusión definitiva, por lo que las cartas en cuestión podrían arrojar más luz sobre el tema. La correspondencia de Stolz incluye también 80 cartas escritas por Giuseppina Strepponi, la mujer de Verdi, en las que se respira un tono de conversación familiar, sin que en ningún momento se haga alusión a asuntos sentimentales. De las 155 cartas de Verdi, 75 están fechadas en los cuatro últimos años de vida del músico, ya viudo (Strepponi murió en 1897). De su contenido se desprende la existencia de un sentimiento profundo que quizá pudo ir más allá de la simple amistad, como cuando el compositor escribe: “¡Estaremos solos! No invitaré ese día ni a Giulio [Ricordi] ni a Boito” o “Mil besos, y no añado más”.