Nueva York se queda definitivamente sin música

Nueva York se queda definitivamente sin música. El último en anunciar el cese de cualquier actividad como, muy pronto, hasta 2021 ha sido el Carnegie Hall, que se suma de esa manera a los cierres del Lincoln Center y del Metropolitan. En realidad, todo Estados Unidos se queda sin música, porque los grandes teatros de ópera, como San Francisco, Chicago o Los Ángeles, han anunciado el cese de actividades mientras dure la pandemia del coronavirus, que se está cebando con aquel país más que con ningún otro en todo el mundo.
“Tomar esa decisión ha sido muy difícil para nosotros. Sin embargo, la seguridad de los artistas, del público y del personal del Carnegie Hall es primordial. Tras consultar de forma continuada a los profesionales médicos y otros expertos, hemos llegado a la conclusión de que, ante las actuales restricciones decretadas por el Gobierno y los protocolos de distanciamiento social, de que no hay otra opción que prorrogar el cierre del Carnegie Hall hasta final del año natural, a la espera de que las condiciones de salud mejoren. Es un momento enormemente difícil para todos nosotros, pero seguimos centrados en prepararnos para cuando volvamos a estar juntos. Mientras tanto, seguiremos en contacto con el público participando activamente en nuestra misión musical a través del servicio digital”, ha declarado en un comunicado Clive Gillinson, director ejecutivo y artístico del Carnegie Hall.