NECROLOGÍA / Marçal Cervera (1928-2019)

Marçal Cervera [en la foto, a la izquierda, junto al arquetero Francisco González], referencia de varias generaciones y uno de los últimos de la gran escuela del violonchelo, falleció el pasado día 20 de septiembre en Begur, donde residía desde hace muchos años. Es una muy triste noticia para todos los que tuvimos la suerte de ser, no solo alumnos sino, me atrevo a decir, discípulos. Discípulos por lo que sus enseñanzas tenían, tanto de formación musical total, como de constación de una inevitable y permanente evidencia de que quien las impartía era un verdadero sabio; muy diferente en todos los aspectos a lo que se consideraba un profesor al uso.
Era de tal dimensión su sabiduría, instrumental y musical, que no ha dejado de alimentar durante toda nuestra vida profesional a quienes pasamos por la Hochschule de Friburgo o por los diversos centros donde ejerció su «cátedra» con inigualable maestría. Un humanista del violonchelode los que no abundaban entonces —y aún menos ahora—- que hoy ya es leyenda y al que las generaciones más recientes ni siquiera conocerán por su nombre. Algunos, los más jóvenes, por la avanzada edad del maestro. Los que lo son menos, porque desconocían que desde 1990 y tras toda una vida en Europa ejerciendo su doble vertiente de intérprete y profesor (en Italia, como asistente de su maestro Gaspar Cassadó [Paul Tortelier fue su otra referencia]; en Suiza, como primer violonchelo en Zúrich, Winterthur o Lausana; y en Friburgo, donde durante 25 años ocupó una cátedra a la que peregrinaban legiones de alumnos de todo el mundo), regresó a España con la intención de regalar su saber tras tantos años fuera del país.
Esto habría sido así si no hubiera habido quienes se encargaron de ningunear y prácticamente condenar al ostracismo a alguien que aún disponía de décadas por delante para transmitir una información que no estaba al alcance de cualquiera y que solo él era capaz de acumular. No es menos triste la situación por conocida ni por repetida. Tampoco por habitual. (Se la conoce como marca España. O marca Cataluña. En estos casos funciona exactamente igual).
Se va un grande y con él, una idea de lo que es la interpretación y lo que es la Música como arte supremo. ¡Gracias, Maestro!
Miguel Jiménez es solista de violonchelo
en la Orquesta Nacional de España