MALPARTIDA DE CÁCERES / Borrar para [oír] más claro
Malpartida de Cáceres. Museo Vostell Malpartida. 28-X-2023. XXV Ciclo de Música Contemporánea del Museo Vostell Malpartida. La Raya Bandas Collective (Agrupación Musical “Los Arcos”, Banda de Música de Alburquerque, Banda Municipal de Música de Cáceres). Director: Javier González Pereira. Bernal: dé-coll/age.
«[…] music can only lead to catastrophe.
This catastrophe we allowed to take place.»
Morton Feldman
Hay una pulsión autodestructiva instalada en el núcleo de algunas músicas abiertas o indeterminadas que, me parece, habría de ponerse más a menudo en relación con las prácticas de décollage desarrolladas por Vostell y su consigna lapidaria sobre las implicaciones vitales de entregarse a lo desconocido. Si aceptamos la composición como la “construcción”, en términos feldmanianos, de nuevas realidades, de modos alternativos de escucha y de interacción con nuestro entorno, no podemos sino aceptar también que, en las ocasiones más excepcionales, ésta asuma, con anterioridad, la forma de una catástrofe “milagrosa”, capaz de generar experiencias traumáticas y monstruosas. Es sólo en estas situaciones, como sabemos, que queda expuesto el “ruido” invisible de sus estructuras profundas, su vida “in/an-terior”, esto es, la putridez necesaria, siendo ésta una apertura que posee, por ello mismo, una dimensión regresiva irresoluble. Tal ha sido siempre, pienso, la actitud de alguien como Alberto Bernal (1978) frente al estímulo de la creación artística, pero me resulta asimismo evidente que en ninguno de sus trabajos anteriores había logrado combinar tan inteligentemente su habitual perspicacia crítica con una igualmente honda sensibilidad expresiva como en su más reciente dé-coll/age (2023), una propuesta para el Museo Vostell Malpartida, con el apoyo del CNDM, en la que, como en los perros muertos de Los fuegos, los puñales brotan de las entrañas, con la punta dirigiéndose hacia fuera.
El uso que hace Bernal en dé-coll/age de la marcha-pasodoble Todo son nubes, del placentino Román de San José, tiene, desde el principio, el ánimo de transformar una situación convencional de concierto, frontal y pasiva, en otra cosa muy diferente. A escasos minutos de levantar colectivamente el vuelo, música e intérpretes inician su lento desmembramiento, que es uno tanto musical como físico: así, sucesivamente, los músicos se desprenden de sus sillas mientras se desligan del tempo compartido —muy a la manera de A Tempo (2018) y de otras obras del compositor madrileño de esa misma época—, dispersándose por el pabellón, primero, hacia los extremos, en un movimiento pendular, y, después, recorriéndolo de manera más libre o aleatoria, confundiéndose gradualmente con el público y permitiendo, de esta manera, que éste penetre físicamente en el interior de la música. Deambulando por el lugar de forma autónoma o junto a ellos, o deteniéndose en un punto fijo, como quien pasea por una exposición o por el campo, tiene uno la oportunidad de encontrar diferentes puntos de escucha desde los que percibir cada una de las células individuadas de un modo que desde la distancia de la forma intacta habría sido imposible, a la vez que redimensionar, en tiempo real, su posición con respecto a una extraña polifonía ya congelada en una suerte de “estatismo dinámico” que pienso que, quizá, en un espacio más amplio y adecuado que éste, alguien podría tomarse la molestia de confrontar debidamente con el schwebung vostelliano.
No habrá nunca dos personas que, al acabar, hayan escuchado la misma obra. Y esto es fruto, naturalmente, de una postura plenamente cageiana, al menos en la medida en que no es Bernal —o no él solamente— quien se encarga de recolectar, reagrupar y reinterpretar los fragmentos dispersos, sino que, como en muchas otras de sus piezas, prefiere mantenerse parcialmente al margen y limitarse a proporcionar el “vacío” necesario para que las cosas sucedan por acción de otras fuerzas. De este modo, el cuerpo —el del público y el de los músicos— se convierte, a través de su propia itinerancia, en el mapa-partitura de una música nómada o a la deriva que, en vista de sus últimos trabajos, sin duda puede y probablemente deba ser leída en el marco de un creciente interés por explorar las significaciones musicales que rodean al acto de explorar y definir un espacio a través del paseo, entendido éste, casi en la misma clave de las incursiones de Vostell en el ámbito del land art, como un intento urbanita de recuperar la conexión perdida con la naturaleza.
Una repentina mejora de las condiciones climáticas permitió, durante el último tramo de la pieza, salir al exterior del edificio para culminar, tras una hora de concierto, con la disolución definitiva del mismo en la charla casual de los malpartideños y de otra gente que pasaba por allí, en el piar de los pájaros, en el estornudo de un niño, en el rugido de una moto, a lo lejos, corriendo por un camino de grava, y en el sonido cortante del viento terminando de barrer lo poco que quedaba de una música que, claramente, continuaba ya en otra parte. De haber contado con un cielo más propicio para realizar la obra conforme al plan original, esto es, al aire libre, junto a la laguna artificial de Los Barruecos, los instrumentos habrían sido abandonados por los músicos en los lugares en los que éstos se encontraban, circunstancialmente, al terminar su “viaje”, convirtiéndose, así, como las manchas de agua y barro impresas por las botas en el suelo del polideportivo, en la huella de un siniestro catastrófico, o de un suicidio colectivo —léase esto último, también, en clave ecológica y humanista—, pero también en pedazos de una gran escultura natural, como lo fueron, para Vostell, en 1954, los sesos del piloto de Le Figaro, esparcidos por las rocas y las ramas de los árboles cercanos al lugar del accidente. De haber sido así, hoy, domingo, la lluvia torrencial en Malpartida ya lo habría borrado todo. “Borrado”, que habría dicho Vostell, “para [oír] más claro”.
Jesús Castañer
En recuerdo de Mercedes,
a quien no conocí
y me cambió la vida.
(Fotos del cuerpo del texto: Fede Carrillo)