La Grande Chapelle redescubre a José de Baquedano
Pocas formaciones han investigado con tanta pasión y con tanto rigor en el patrimonio olvidado de la música española, ya sea renacentista o barroca, como La Grande Chapelle de Albert Recasens, que vuelve ahora a sorprender con la publicación de un CD en el sello Lauda, bajo el título de Música para la catedral de Santiago, dedicado al muy desconocido José de Baquedano (Puente la Reina, 1642-Santiago de Compostela, 1711).
Situado en el extremo occidental de Europa, Santiago de Compostela ha sido centro espiritual y artístico desde la Edad Media. En el siglo XVII, su catedral vivió un período áureo que supuso la transformación del edificio románico en un espacio barroco. Se cultivó profusamente el estilo policoral para dar solemnidad y grandiosidad a las ceremonias religiosas. Entre los maestros de capilla de la catedral compostelana, destaca el mencionado Baquedano, compositor navarro que perfeccionó su arte con Matías Ruiz en el Real Monasterio de la Encarnación de Madrid. Después de tres décadas de magisterio, dejó una notable producción vocal en castellano y en latín, en la que sobresalen sus piezas para Semana Santa. La presente grabación ofrece una novedosa antología de la obra latina de Baquedano, con una selección de motetes, salmos y lamentaciones para dos y tres coros, que revela el brillante talento de este compositor situado en el Finis Terrae.
Aunque es una de las figuras más destacadas del Barroco musical español, su obra no ha sido suficientemente puesta en valor, quizás porque se sitúa entre dos grandes referentes artísticos del siglo XVII: Juan Hidalgo y Sebastián Durón, músicos de Corte y con gran proyección en el ámbito hispano. La mayor parte de su producción se conserva actualmente en el archivo compostelano: cinco misas, siete lamentaciones, dieciséis salmos, dieciocho motetes, tres cánticos (dos magníficats y un Nunc dimittis), cuarenta y seis villancicos, además de una sonata instrumental. En total, casi un centenar de obras vocales religiosas escritas para distintos efectivos, desde piezas a solo hasta composiciones a cinco coros.
En el marco del proyecto que desarrolla en el Instituto Cultura y Sociedad (ICS) de la Universidad de Navarra, Albert Recasens ha realizado una rigurosa investigación, el estudio musicológico paralelo y la coordinación de la transcripción de obras destacadas del repertorio en latín de Baquedano. Para ello ha seguido la metodología científica que ha aplicado en anteriores recuperaciones de otros compositores españoles de los siglos XVI, XVII y XVIII. Al frente de su conjunto musical, Recasens ha grabado este álbum, que contiene una selección de motetes, salmos y música de Semana Santa para un máximo de doce voces. Destaca la grabación de un Miserere a 10 voces siguiendo la práctica interpretativa de la época y el uso de la plantilla original en la Lamentación de Jueves Santo a 6 voces, con las vihuelas de arco.