Europa, 1923

1923, THE WILD SOUND OF THE  20s:
Obras de Bartók, Weill, Toch & Krenek / Chor des Bayerischen Rundfunks. Dir.: Howard Arman. Symphonieorchester des Bayerischen Rundfunks. Dir.: Cristian Macelaru / BR Klassik

Retrocedamos cien años. Este álbum -un deslumbrante acto de programación creativa de la Radio de Baviera- incluye a tres jóvenes compositores en el Berlín hiperinflacionario, y a un cuarto que danzaba en los márgenes.

Imaginemos la capital de un imperio derrotado, asolada por luchas callejeras y todo tipo de inseguridades. Estamos en 1923 y la radiodifusión acaba de comenzar en la Potsdamer Platz. Los estudiantes de música escriben lo que se les ocurre con la esperanza de que salga en antena. En el conservatorio, Ferruccio Busoni revisa sus partituras y les anima a ir más allá. En los clubes y cabarets se baila toda la noche. Una hogaza de pan de centeno cuesta cinco millones de marcos, pero la música no deja de sonar.

Ernst Toch, confortablemente casado con la hija de un banquero, recibe el encargo de escribir una pieza de “blues radiofónico”. Su Suite de danzas para tres instrumentos de cuerda, flauta, clarinete y percusión resulta más melancólica que bluesy, y vulnera la forma sonata con una libertad que rara vez se escucha en las canónicas sinfonías que compuso. Esta pieza de media hora posee un sólido atractivo y un clarinete muy sexy.

La Frauen Tanz (Danza de mujeres) para soprano y cinco instrumentos de Kurt Weill no es menos deliciosa. El Weill de 23 años podría confundirse fácilmente en algunos momentos con el vienés Alban Berg, hasta que asesta un puñetazo de acre cinismo berlinés e inimitable agudeza.

Ernst Krenek, también de 23 años, estaba casado por entonces con la hija de Gustav Mahler y andaba buscando una voz propia. Sus tres piezas para coro mixto a cappella lo sitúan entre los adalides de la ruptura tonal. Un par de años más tarde escribiría la primera ópera inspirada en el jazz.

El álbum concluye con la Suite de danzas de Bela Bartók, una amalgama multicultural que protestaba contra el imparable auge del nacionalismo. Era 1923 y un compositor no podía permanecer en silencio ante las sonoras grietas de un continente que se resquebrajaba.

Los intérpretes son muniqueses. La soprano Anna-Maria Palli está impresionante en las canciones de Weill. Howard Arman dirige el coro de la Radio de Baviera y Cristian Macelaru la extraordinaria orquesta. Si este programa marca de algún modo la pauta para 2023, nos espera un año apasionante.

Norman Lebrecht