El Festival de Torroella de Montgrí cierra con éxito una edición atípica

El Festival de Torroella de Montgrí ha cerrado de forma exitosa una edición atípica, marcada evidentemente por la pandemia de la Covid-19. La ambiciosa programación extraordinaria que se había planificado inicialmente para conmemorar el 40º aniversario del festival bajoampurdanés tuvo que reducirse a solo cinco conciertos, los cuales pudieron ser seguidos, en directo en el Espacio Ter y por streaming, por casi 15.000 personas. Estos cinco conciertos han sido el preludio de esa programación ya aludida, que habrá de completarse el próximo verano y que tendrá su continuación este otoño con diversas conferencias y con la inauguración de una exposición sobre estas cuatro décadas de existencia del festival.
“El deseo irrenunciable de escuchar música en directo ha provocado que se agotaran las entradas de todos los conciertos programados. El compromiso y la responsabilidad de cada una de las personas del equipo de producción, ha propiciado la ejecución del protocolo de las medidas de seguridad sanitarias con rigurosidad y exigencia sin que se haya producido ninguna incidencia y garantizando un entorno seguro. Y todo esto solo ha sido el preludio de todo lo que queda por llegar en la celebración del 40º aniversario del Festival de Torroella”, explica Montse Faura, directora del festival, quien asegura que “la conexión que se ha establecido entre los artistas y el público ha sido de una alta sensibilidad añadida, pues en cada velada se ha creado una atmosfera única y extraordinaria”.
Todos los conciertos han tenido aforos limitados a un tercio de la capacidad del espacio donde se han celebrado, se ha escalonado las entradas y salidas de los espectadores para evitar aglomeraciones, se ha tomado la temperatura al público a la entrada y a la salida de los conciertos, y se ha informado a todos los espectadores de las condiciones sanitarias que se aplicaban en cada concierto enviando un correo al público la víspera de cada actuación.
“Teníamos claro que no podíamos silenciar la música, que había que encontrar formas y fórmulas para seguir”, afirma Faura. “Cuarenta años del Festival del Torroella merecen ser valoradas por haber llegado y por haberlo hecho con muy buena salud musical. Hemos realizado cambios y rehecho posibles escenarios para poder cumplir nuestro compromiso con el público. Y siempre hemos contado con el apoyo de la junta directiva de Juventudes Musicales de Torroella, que organiza el festival, de las administraciones y de los patrocinadores, que han aceptado y valorado todas las propuestas y reinvenciones que hemos hecho, a veces en formatos nuevos, coma ha sido la producción de un documental”, añade.
Está previsto que los actos de celebración del 40º Festival de Torroella continúen en otoño, con el ciclo de conferencias “Beethoven, un retrato musical”, a cargo del divulgador musical Joan Vives. El 16 de diciembre, día del 250º aniversario del nacimiento de Beethoven, se inaugurará la primera parte de la exposición sobre el festival, que se presentará en forma de suite, como una sucesión de acontecimientos que transcurrirán en el tiempo y en diferentes espacios. El primer movimiento de esta suite se presentará en la Fundación Vila Casas y girará en torno al sinfonismo en el festival, de Beethoven y del contexto histórico de Bonn y Viena trasladados al imaginario de Torroella de Montgrí en la misma época.
El segundo movimiento de la exposición se presentará en la iglesia de Torroella de Montgrí alrededor de Semana Santa y tratará el tema de la música sacra. El tercer movimiento se presentará en la Fundación Mascort, un espacio relacionado con los pájaros, la naturaleza y el mundo, que nos invitará a repetir el concurso de imitadores de pájaros que se celebró en 2003 en el Festival de Torroella y a recordar antiguas ediciones del apartado de Músicas del Mundo del Festival.
(Foto: Martí Artalejo – Festival de Torroella de Montgrí)