El Concierto de Año Nuevo de Viena, inundado de novedades

El próximo 1 de enero se repetirá el ritual del concierto clásico más visto del año, con una audiencia televisiva que se estima en unos 50 millones de personas: la Sala dorada del Musikverein vienés, generosamente decorada con flores de distinguidos jardines austriacos, acogerá de nuevo a la Orquesta Filarmónica de Viena en la octogésima tercera edición del famoso Concierto de Año Nuevo.

Se sube al podio en esta ocasión el austriaco Franz Welser-Möst (Linz, 1960) [en la foto], que lleva veinticinco años colaborando con la orquesta, y que ya dirigió este evento en los años 2011 y 2013. Comenta el director, en una reciente entrevista con Benjamin G. Rosado en La Lectura, que el reto de este concierto no debe ser asumido a la ligera por directores que no hayan cumplido los cincuenta, porque “es una responsabilidad inmensa no apta para principiantes”. ¿Dardo para algún joven que se ha asomado ya al concierto sin haber llegado a los cuarenta? Podría ser, pero en todo caso bien puede decirse que no le falta razón en su afirmación. El reto es más considerable y tiene más riesgo (entre otras cosas, precisamente porque es muy visible) del que parece.

En el de este año se cuenta con el Coro de Cantores de Viena (el de niños celebrará el 525º aniversario de su fundación en 2023; el de niñas fue fundado en 2004 y, si no me falla la memoria, es la primera vez que actúa en el concierto de Año Nuevo). Los cantores actuarán en dos obras de Josef Strauss, las polcas Heiterer Muth  y For ever.

Welser-Möst ha decidido inundar el programa de novedades. Si habitualmente se incluyen, al menos en años recientes, entre seis y ocho novedades, este año trece de las quince (excluyendo propinas) obras se interpretan por primera vez en el concierto de año nuevo. Teóricamente eran catorce, pero la primicia de la primera de esas polcas citadas apuntada en el programa inicial facilitado por la Filarmónica de Viena no es en realidad tal, porque fue incluida por Clemens Krauss en el concierto de año nuevo de 1948. Así pues, son trece las primicias, y dos las obras que han figurado alguna vez en los programas de estos conciertos: la mencionada Heiterer Muth y el vals Aquarellen op. 258, también de Josef Strauss, que cierra el programa oficial antes de las propinas y la felicitación del año nuevo por parte del director. Josef Strauss es la otra impronta notable del programa propuesto por Welser-Möst, porque a él pertenecen ocho de las quince obras propuestas.

¿Qué podemos esperar? Los antecedentes, para qué engañarnos, no son especialmente alentadores. Los conciertos anteriores de Welser-Möst estuvieron, como es natural teniendo en cuenta la calidad de la orquesta y el repertorio del que hablamos, espléndidamente ejecutados, pero se antojaron sosos, en parte por los programas y en parte porque el de Linz, sin duda un director técnicamente sólido, no parece tener la chispa para que este repertorio llegue con el encanto que posee. No hay que ser tan malvados como algunos medios británicos, que le han salpicado con perversos apodos como Franz, worst than most o Franz, no other worst, pero esta tercera presencia en el conocido concierto vienés no despierta, a priori, el entusiasmo que si han provocado algunos otros colegas suyos. En una entrevista que publicaba el día de Nochebuena el diario Der Standard, el director de Linz declara de forma rotunda que “no habrá bromas”, por aquello de que el mundo está como está (lo que sin duda es cierto, aunque justamente por eso hay quien puede pensar, no sin razón, que podría ser conveniente una cierta nota de humor).

La abrumadora mayoría de primicias es también una incógnita. Con pocas excepciones, aunque algunas hay, las primicias en este concierto han permitido confirmar… que si no habían sido incluidas en los programas anteriores era por una buena razón: su calidad. Hay que tener en cuenta que en la profusa producción de los Strauss hay de todo: cosas extraordinarias, cosas buenas, cosas regulares… y cosas mediocres. En todo caso, no anticipemos acontecimientos. Veremos lo que nos depara el concierto.

Para los amantes del ballet, el de la Ópera Estatal de Viena, con coreografía de Ashley Page, ofrecerá su intervención en tres obras: el vals Perlen der liebe de Josef Strauss, la polca Auf und davon de Eduard Strauss y el inevitable Danubio azul. La propina programada, antes de la tradicional felicitación del año por Welser-Möst, que precede al cierre del concierto con este vals y la Marcha Radetzky de Johann Strauss padre (en su versión desnazificada), es el Banditen-galopp de Johann Strauss hijo.

A continuación, el programa íntegro con enlaces a algunas interpretaciones disponibles (no he localizado ninguna de la Glocken-Polka mit Galopp del Ballet Excelsior de Hellmesberger):

PRIMERA PARTE

Eduard Strauss: Wer tanzt mit? Polka schnell op. 251* / Filarmónica de Viena – Welser-Möst

Josef Strauss: Heldengedichte. Walzer op. 87* / Filarmónica Eslovaca – Müssauer:

Johann Strauss hijo: Zigeunerbaron-Quadrille op. 422* / Filarmónica Eslovaca – Alfred Walter:

Carl Michael Ziehrer: In lauschiger Nacht. Walzer op. 488* / Sinfónica de Berlín – Stoltz:

Johann Strauss hijo: Frisch heran! Polka schnell op. 386* / Filarmónica Estatal Checa – Walter:

 

SEGUNDA PARTE

Franz von Suppè: Ouvertüre zur Operette “Isabella”* / Real Orquesta Nacional Escocesa – N. Järvi:

Josef Strauss: Perlen der Liebe. Walzer op. 39* / Orq. Johann Strauss de Viena – W. Boskovsky:

Josef Strauss: Angelica-Polka. Polka française op. 123* / Orq. Festival Strauss de Budapest – Walter:

Eduard Strauss: Auf und davon. Polka schnell op. 73* /Orq. Festival Strauss de Budapest – Guth:

Josef Strauss: Heiterer Muth. Polka française op. 281 (con los Cantores de Viena) / Filarmónica de Viena – Boskovsky:

Josef Strauss: For ever. Polka schnell op. 193* (con los Cantores de Viena) / Filarmónica de Viena – Welser-Möst:

Josef Strauss: Zeisserln. Walzer op. 114* / Filarmónica Eslovaca – Pollack:

Josef Hellmesberger (hijo): Glocken-Polka mit Galopp aus dem Ballett Excelsior*

Josef Strauss: Allegro fantastique. Orchesterfantasie Anh. 26b* / Orquesta Johann Strauss de Viena:

Josef Strauss: Aquarellen. Walzer op. 258 / Filarmónica de Viena – Lorin Maazel:

* Primera vez por la Filarmónica de Viena en los conciertos de Año Nuevo.

 

PROPINAS

Johann Strauss, hijo: Banditen-Galopp op. 378 / Filarmónica de Viena – Jansons:

Johann Strauss, hijo: An der schönen blauen Donau, Walzer op. 314 / Filarmónica de Viena – Carlos Kleiber:

Johann Strauss, padre: Radetzkymarsch, op. 228 (revisión de la Filarmónica de Viena) / Filarmónica de Viena – Riccardo Muti:

Rafael Ortega Basagoiti