El canto de la tierra, al lado del mar de Cartagena de Indias
Desde hoy, 5 de enero, y hasta el próximo día al 13 de se llevará a cabo el Cartagena XVII Festival de Música dedicado especialmente al nacionalismo musical centroeuropeo y eslavo. Durante estos días, se escucharán recitales y conciertos de los célebres compositores que buscaron las raíces folclóricas para generar una visión patriótica en su música con sus ritmos, armonías y candencias propias en la línea melódica.
El festival tiene como título El canto de la tierra. Música entre nacionalismo y cosmopolitismo en el siglo XIX. En este encuentro se podrán escuchar 26 conciertos en la ciudad amurallada del Caribe con programas donde se resaltan las obras de Frédéric Chopin, Piotr Ilich Chaikovski, Bedrich Smetana, Antonín Dvorák, Mikhail Glinka o George Enescu, entre otros grandes nombres del periodo.
El concierto inaugural correrá a cargo de la Orquesta de Cámara de Praga, en el Teatro Adolfo Mejía y durante los restantes ocho días se realizarán conjuntamente conferencias sobre el nacionalismo musical con los recitales, las obras de cámara y de tipo sinfónico. Además, el festival tendrá un capítulo sobre la música colombiana clásica, pero no del siglo XIX, sino la mayoría del siglo XX, con autores tan reconocidos en este país como Guillermo Uribe Holguín, Luis Antonio Calvo, Oriol Rangel o Adolfo Mejía, entre otros.
Es de destacar que el concierto final lo realizará el 13 de enero la Orquesta Sinfónica de Cartagena en el Auditorio Getsemaní del Centro de Convenciones, donde se interpretarán obras tan diversas y distantes entre sí como las Danzas húngaras de Johannes Brahms, selecciones de La Arlesiana de Georges Bizet, así como música del maestro colombiano Lucho Bermúdez, especializado en música de baile tropical.
En el marco de una ciudad costeña y caribeña, se podrán escuchar en esta edición del Cartagena XVII Festival de Música, obras comprometidas con el nacionalismo, pero inspiradas más en las llanuras, en los bosques, en las estepas, en las zonas interiores de los campos Centroeuropa, más que en las zonas costeras del mar Báltico o del Mediterráneo.
Ricardo Visbal
