Perdendose
Perdendose. Es una indicación musical.
No hieras a quien no puedes matar, no provoques tanto ni finjas ser tan guapo, si no lo eres.
Hay quien permitió tu desorden para no provocar una guerra.
La aplazó en su detrimento, según el florentino, ¿lo recuerdan?
Pero después de jugar a la política, estos chicos tendrán que gobernar, o alguien lo hará.
Perdendose.
Insensatos con rostro grave muestran su patita totalitaria a propósito del bilingüismo.
Mas la impunidad no dura siempre, mis valientes.
Colegas míos genovenses suspiran por su puestecito mal ganado: bien, un mes más.
Mas el saqueo acaba un día, gente respetable.
En España no amamos a los idiotas. Pero sí a nuestro idiota. Véanse elecciones.
Las dos últimas.
En España gustan los chulos, pero no en política. Ni siquiera nuestro chulo. Ojo.
Perdendose…
Es una indicación musical para que el sonido se disuelva, se resuelva. Poco a poco.
Perdendose: al final de El marandarín maravilloso, por ejemplo.
Perdendose.
Tiene que durar. Pero tiene que durar poquito. A veces dura más de lo conveniente.
Esto está durando demasiado.
La gente empieza a hartarse. Perdendose.